Este año se ha puesto el mundo por montera y junto a la directora del Festival, Ruth Armas, será el encargado de la organización de la IV edición de FICGáldar.
¿A Julio Mateo le gusta más entrevistar o que le entrevisten?
Bueno, realmente siempre he tenido vocación periodística y me gusta mucho el mundo de la comunicación, aunque finalmente decidiera estudiar Políticas y dedicarme activamente a ella en estos momentos, pero si me preguntas si me quedo con la política o con el periodismo, creo que no sabría qué responderte. Para mí es como la pregunta de papá y mamá.
25 años, concejal de Cultura y Festejos del Ayuntamiento de Gáldar, sexto teniente de alcalde y portavoz del grupo político Bloque Nacionalista Rural-Nueva Canarias (BNR-NC) en Gáldar… ¿Usted, está corriendo mucho no?
Creo que no más de lo que deberíamos los jóvenes en general. En estos momentos en los que se habla mucho de generación nini, de paro juvenil y de zona de confort, los jóvenes no podemos conformarnos con el pesimismo y tenemos que luchar por romper esquemas y abrirnos hueco en la sociedad en la que vivimos. Las crisis, si algo son, son evidencia clara de que hacen falta cambios, y ante problemas enquistados, creo firmemente que sólo las nuevas generaciones, con ideas y fuerzas renovadas, tenemos la capacidad de ver las cosas de otra manera y hacer los cambios que necesitamos. Quedarse en la zona de confort y no mojarse me parece cobarde. Tenemos que luchar por cambiar las cosas y por construir un futuro mejor para nuestros pueblos. Si no lo hacemos nosotros, nadie nos lo va a dar hecho.
¿Político y comprometido como usted no van siempre, desgraciadamente, de la mano?
Desgraciadamente no. Y es realmente un problema, porque al final por unos pocos pagamos todos, y se termina hablando de clase política como si fuera un ente abstracto que no lo forman ciudadanos como tú y como yo. Acostumbrarnos a pensar que todos son iguales es un gran daño que se hace a la democracia y, sobre todo, cuando nos conformamos y a pesar de los casos de corrupción y de la forma de entender la política que tienen algunos, les siguen votando, se le hace más daño todavía. En eso también los jóvenes debemos dar ejemplo.
¿Hacerse cargo de la organización del Festival de Cine más importante de Gran Canaria es algo más que una alfombra roja?
No sé de qué color será la alfombra, pero sé que hemos puesto altas dosis de ilusión y de trabajo, a partes iguales, para que este Festival Internacional de Cine de Gáldar mejore y crezca. Es el segundo año que lo organizo al frente de la Concejalía de Cultura de Gáldar, y creo que esta es la edición donde se va a notar los cambios que apreciamos que eran necesarios desde la edición 2015. Necesarios para que el FIC Gáldar se convierta en un gran referente de la cultura cinematográfica en Canarias con mayúsculas.
Haciendo tándem con Ruth Armas, que es una mujer de “armas” tomar.
Desde luego. Fíjate que Ruth es también del mismo barrio de Gáldar que yo, un barrio humilde del que no nos hemos olvidado. Los dos coincidimos también en que salimos fuera de Canarias a labrarnos un futuro, pero nunca nos olvidamos de nuestra casa, de nuestra Gáldar, y decidimos volver. Ella creó un pequeño gran monstruo hace cuatro años cuando decidió empezar con aquel sueño del FIC Gáldar. Cuatro años después creo que no miento si digo que Gáldar puede sentirse orgullosa del avance que ha ido conquistando el festival. Pero, para mí, lo que más destaco de Ruth es su capacidad para seguir siendo humilde. Me parece fundamental que el FIC Gáldar se haga grande, pero nunca deje de ser humilde. Sólo así podrá crecer.
Todo eso comenzó hace cuatro años cuando una galdense le echó arrestos y apostó por un festival en su tierra…usted ha apostado de lleno desde el primer momento. Es difícil encontrar políticos que se impliquen tanto como usted…
Gáldar ha tenido la suerte de tener al frente de Cultura a personas responsables con lo que la Cultura significa. Carlos Ruiz, el concejal anterior y ahora consejero de Cultura del Cabildo, fue realmente quien apostó desde un principio por este Festival, y desde luego todo el apoyo que él prestó desde el minuto uno ha sido fundamental para el Festival. Y ahora, desde el Cabildo, no se ha olvidado y ha seguido apoyando con más fuerza si cabe a este Festival. Creo que Carlos hizo un grandísimo trabajo al frente de esta concejalía y lo está haciendo también ahora en el Cabildo. Mi parte de culpa ha estado en estas dos últimas ediciones y en seguir adelante con el proyecto, hacer que crezca lo mejor posible. Al final en política siempre se habla de herencias recibidas, y creo que de Carlos Gáldar ha heredado una muy buena herencia cultural que tenemos que seguir cultivando muy bien para que siga creciendo.
Shakespeare y Cervantes. ¿Con cuál se queda? ¿Hamlet o Quijote?
Me quedo con el producto nacional, con Cervantes. Sus sueños se asemejan a los de este Festival, que nació en medio de la crisis y con todos los inconvenientes habidos y por haber, y ha conseguido salir adelante a pesar de las dificultades. Ahora los molinos empiezan a ser reales y el festival empieza a tomar la dimensión de aquellos gigantes a los que Cervantes se refería.
¿Hasta qué punto es fundamental que las instituciones apoyen iniciativas como es en este caso FIC Gáldar 2016?
Creo que si realmente tenemos la intención de convertirnos en un referente para el mundo del cine a nivel mundial, Canarias tiene la obligación de apoyar iniciativas como ésta, que ponen precisamente al mundo del cine en Canarias y abren, de esta forma, un escaparate al mundo. Pero creo que falta compromiso por parte del Gobierno de Canarias, y no sólo lo digo por el FIC. Creo que la gestión a nivel cultural de nuestro gobierno autonómico lleva muchos años dejando mucho que desear. Y creo además que es una opinión en la que coincide la inmensa mayoría del sector. Hace falta mayor compromiso con la cultura en Canarias. Somos un archipiélago de siete islas en medio del Atlántico, a miles de kilómetros de la civilización más cercana, y eso nos obliga a no poder renunciar a la Cultura. La necesitamos como el agua para seguir cultivando nuestra idiosincrasia y nuestros valores.
Que Gáldar llegue este año hasta los mentideros de la villa de Madrid mola mucho ¿no?
Es fundamental la promoción publicitaria en el exterior, y eso es lo que hemos intentado hacer haciendo la presentación del FIC en Madrid este año por primera vez. Pero sin olvidarnos que no es un fin en sí mismo ese acto, lo hacemos para que Madrid venga a Gran Canaria y a Gáldar, y que el mundo del cine conozca lo que se hace y lo que se puede hacer aquí.
Gáldar se convierte en escaparate de Canarias durante una semana. ¿Qué es lo que expone en sus vitrinas?
Además de mucho cine, Gáldar tiene muchísimo que exponer: un patrimonio histórico impresionante, digno de la que fue capital prehispánica de esta isla, pero también un patrimonio intangible muy importante, las ganas de hacer cosas y de salir a la calle. Gáldar es una ciudad viva y con un ambiente impresionante cada vez que se hace algo. Y por supuesto nuestros paisajes: desde la costa hasta la cumbre tenemos paisajes para inmortalizar en la gran pantalla o en la pequeña pantalla de nuestro móvil que son capaces de dejar con la boca abierta a todo el mundo. Ese es un gran valor que nos ha servido para ser sede de la grabación de películas de muy alto nivel como Palmeras en la Nieve o El Contenido del Silencio.
Mire usted que yo le veo presentando un corto o dirigiendo en Gáldar Rueda….
De momento me quedo con la dirección de esta Concejalía que no deja mucho tiempo para otras cosas, pero como se suele decir, nunca digas nunca…