La Mancomunidad de Ayuntamientos del Norte de Gran Canaria firmará en la próxima Junta de Gobierno, que se celebrará el 12 de septiembre, una declaración institucional en apoyo a los municipios afectados por el voraz incendio forestal declarado en la cumbre de la isla. Un documento en el que los diez consistorios que forman el ente supramunicipal, instarán a las diferentes administraciones competentes a la adopción con celeridad de las medidas necesarias para atender a las personas damnificadas y la reposición de las viviendas y explotaciones agrícolas y ganaderas devastadas por el fuego, así como para la recuperación de los ecosistemas dañados. Más de doce mil hectáreas quemadas de varios municipios de la Comarca Norte como son Artenara, Valleseco, Agaete, Moya y Gáldar, además de Tejeda y San Mateo, en una superficie de gran protección por su alto valor ecológico y etnográfico.
No en vano, buena parte del territorio arrasado por las llamas albergaba explotaciones de agricultura y ganadería ovina, caprina y bovina para autoconsumo o venta local, además de queserías artesanales. Varias de estas explotaciones quedaron completamente devastadas por el fuego, suponiendo la pérdida absoluta de la producción, y otras atraviesan serias dificultades para mantener la actividad al quedar desconectadas de los sistemas de riego o bien al haber desaparecido el alimento de los animales. En este sentido, la Mancomunidad entiende que esta situación requiere de la tramitación urgente de las ayudas públicas y de la movilización de los medios técnicos y humanos necesarios para evitar el agravamiento de las consecuencias indirectas del fuego. Sumándose a la tragedia medioambiental importantes pérdidas económicas para numerosas familias y la reducción de las plantaciones y ganados a corto plazo.
Asimismo, la Mancomunidad del Norte apelará en su declaración institucional a prestar especial atención a las zonas naturales dañadas y a extremar la prevención ante posibles lluvias fuertes en el próximo invierno, lo que incrementaría el deterioro medioambiental de Gran Canaria. Donde el incendio ya ha supuesto una catástrofe ecológica sin precedentes, tal y como han indicado los expertos, con el 84% del terreno afecto por el fuego enmarcado en espacios naturales protegidos y más de 150 especies endémicas de flora y fauna que han podido quedar mermadas, entre ellas la magarza plateada de Artenara o la col de risco de Tamadaba.