Los sindicatos ceden aceptando el Convenio Laboral actual, con la suspensión de los artículos que generan más costes al Ayuntamiento, y las reducciones salariales necesarias para garantizar la estabilidad económica y financiera de las cuentas públicas municipales. El grupo de gobierno cede asumiendo una reducción horaria para los trabajadores, que no supondrá ningún coste adicional a las arcas públicas, y aprobando algo que es de Justicia: el pago del 100% del salario a aquellos trabajadores que tengan que solicitar baja por accidente laboral o enfermedad grave.
El acuerdo debería haber sido celebrado por todos, pero sin embargo, no se han cortado un pelo algunos históricos personajes de la política galdense en salir a la palestra y mostrarse furibundos ante el anuncio de que por fin llega la paz social al Ayuntamiento de Gáldar. Hablamos del sector más duro del Partido Socialista, liderado como todo el mundo sabe por el director de cierto medio digital, su redactora y compañía. Parece ser que ha sentado muy mal que por fin el Ayuntamiento tenga rumbo y que los sindicatos finalmente hayan enterrado el hacha de guerra.
Hablan estos ‘periodistas’ de incoherencias entre la postura del alcalde en marzo de 2013 y la postura actual. Parece que no conocen el significado de la palabra negociación. En un acto de conciliación como el celebrado este viernes en sede judicial en Gáldar, se produce una negociación entre las partes, y ambas han tenido que ceder y acercar sus posturas. El alcalde y el grupo de gobierno cedieron en la reducción de jornada laboral, y el sindicato cedió aceptando el Convenio actual hasta el 31 de diciembre de 2015 y la suspensión de los artículos más costosos para el Consistorio. Hablan también de una “reducción salarial impuesta” que, paradójicamente, fue votada por los trabajadores en asamblea. Curiosa imposición.
Sin embargo, los sociolistos siguen empeñados en sacar el lado negativo, aunque sea forzadamente, aunque tengan que recortar las fotos del alcalde en cada una de las visitas que realiza a las obras del municipio. Y se olvidan de que la incoherencia mayor del reino es la de ellos, la de quienes dirigían la radio municipal y militaban en el Partido Socialista mientras en este pueblo, con el gobierno de ese mismo partido, se generaban casi 30 millones de euros, 5.000 millones de pesetas, de deuda. Si alguien tiene la culpa de que ahora se hayan tenido que tomar las medidas que se han tenido que tomar, son ellos, los sociolistos, y en especial su alcalde Demetrio Suárez, al que por cierto no recortan en las fotos de sus visitas.
Los que parece que sí están en campaña son ellos. En realidad llevan en campaña desde que se abrieron su particular panfleto en la red allá por 2003. Para eso precisamente lo hicieron, para hacer campaña. La guerra personal que abrieron contra Teodoro Sosa desde siempre fue clara, como quien les escribe también lo criticó durante mucho tiempo, pero no ahora, cuando los hechos objetivos y los números del Ayuntamiento son más positivos que nunca y, sobre todo, la tendencia anima por fin a la esperanza. Hay que ser sensatos.
Sólo pueden enfadarse porque las cosas vayan mejor quienes han vivido en el oscurantismo de manejar los hilos por detrás del telón, quienes quieren seguir obteniendo beneficios de la polémica y de la política, y quienes no quieren a su pueblo. Pero en definitiva, aunque algunos se empeñen en seguir con la confrontación, en una guerra casi personal en la que cada vez están más solos, lo que queda claro es que Gáldar avanza hacia el futuro, progresa adecuadamente, sus números ya se tiñen de verde, y el esfuerzo de los trabajadores y del grupo de gobierno ha merecido la pena.
Que Gáldar ha cambiado su tendencia en estos años de gobierno de Teodoro Sosa es un hecho. Quien no lo reconozca por odios y revanchismos personales, es su problema. Los ciudadanos ya lo pueden percibir clarito, y eso es lo que más molesta a quienes pretenden confundir y enredar interesadamente como siempre han hecho.
Julio Mateo Castillo
Director de galdaraldia.es