Armando Pérez Rodríguez. (Barrial. Gáldar)
Hijo de Agapito (Teguise, Lanzarote) y María (Barrial. Gáldar)
“Pequeños retazos de mi paseo por la vida”
Recuerdos de una infancia humilde y de aquella escuela unitaria de Barrial en el campo de fútbol, lo que hoy es la cantina y el maestro Don Juan Quesada, a quien siempre estaré agradecido.
Ya desde esa temprana edad, mi vida estaría ligada al deporte, en concreto al fútbol. De esa manera, jugué en los equipos del juvenil de San Isidro y selección juvenil; regionales de San Isidro, Barrial y la selección regional. Acabada esta etapa como jugador, obtengo el título como entrenador de fútbol y entreno a juveniles y regionales de la zona. Asimismo, por encargo de la Federación y Colegio de Entrenadores, convoco y formo la selección infantil y juvenil del norte; consiguiendo que el Colegio de Entrenadores y el Ayuntamiento de Gáldar realicen el primer curso de entrenadores juveniles de fútbol.
Mi etapa deportiva pasaría posteriormente a convertirse en un entretenimiento y seguí jugando en el veterano de San Isidro, dejando el fútbol a la edad de 60 años, en el que siempre fue mi estadio en el minuto 60, rodeado de mi familia y muchísimos compañeros de la época de fútbol. Aún guardo un recuerdo muy emocionante de este día.
En cuanto a mi vida laboral y profesional trabajé en varias actividades tales como la agricultura, la carpintería, etc… para aterrizar junto con mi mujer Manola en el comercio de la mano de mis tíos: Juan Rodríguez y Pino Mendoza, quienes nos traspasan la tienda de confección en la Calle Larga: Capitán Quesada nº29, fachada de la recoba. Manola conseguiría ponerla en valor vendiendo ropa juvenil y vaquera, una de las primeras boutiques de ropa en Gáldar conocida como “Casa Manola”. Pasados los años nos traspasan la dulcería justo al lado de la tienda, haciéndola rentable con la ayuda de mis hijos y empleados después de algún tiempo. Posteriormente solicito permiso municipal para unir los dos puestos y una vez logrado este objetivo decidimos sólo dejar el bazar dulcería piscolabis Joyocayo, por las iniciales de nuestros cuatros hijos, más conocida por nuestros clientes por los perritos calientes y hamburguesas de Manola.
Con toda esta tarea, alquilamos finalmente un pequeño local al lado de la imprenta, lo acondicionamos y abrimos una dulcería churrería con churros madrileños. Allí empieza a trabajar Juan Pedro, el hermano de Manola. Luego el local decidimos traspasárselo a mi cuñado para convertirse con algunos cambios en la que es hoy La Tasca de Juan Pedro.
En estos avatares de mi vida comercial un grupo de empresarios y comerciantes, del que yo fui parte, creamos la Asociación de Empresarios y Comerciantes de Gáldar. Creo que fue la primera y estuvimos 18 años aproximadamente. Luchamos por conseguir hábitos de consumo local, creamos la tarjeta de crédito Tarjeta Norte, así como muchísimos sorteos, entre ellos el de un coche matriculado y asegurado.
Creamos una sociedad mercantil accionaria con el propósito de construir nuestro propio centro comercial en Gáldar. En esos momentos no había centros comerciales abiertos en toda la isla. Gáldar habría sido pionera y fue una lástima no haberlo conseguido.
Con el deseo que la tarjeta Norte alcanzara un ámbito de negocio mayor y fidelizar a nuestros clientes, se crea la federación del norte “Fenorte”, federación empresarial comercial que logra integrar a la mayoría de los municipios de la mancomunidad del norte, creando la primera feria empresarial en el municipio, celebrada en el campo de fútbol de Barrial, siendo todo un éxito. Posteriormnete se integraría Artenor, asociación de artesanos del norte y se crea Arnor, la empresa que comercializa los productos de artesanía.
Bueno, con los datos escritos y a falta de muchísimos matices para dejarlo bien, pero a riesgo de alargarme demasiado y cansar, concluye a finales de 2013 la vida laboral de Manola y mía y por consiguiente nuestro ciclo comercial y empresarial.
Gracias y un cordial saludo de Manola y de Armando.