Sobre las 5 de la tarde partía desde Gáldar una guagua y varios coches privados puestos por el Bloque Nacionalista Rural para transportar hasta la capital a todas las personas que quisieran acompañarles en la manifestación. Una vez en la marcha, el alcalde de Gáldar, Teodoro Sosa, portó una pancarta en la que se podía leer: «No al petróleo, Sí referéndum», en alusión al referéndum propuesto por su grupo (NC) para conocer la opinión de los canarios sobre este asunto y que el gobierno central se niega a autorizar.

Todas las manifestaciones celebradas en Canarias transcurrieron de manera pacífica y concluyeron con la lectura de un manifiesto común en el que se pedía la retirada de la Declaración de Impacto Ambiental por entender que no cumple con rigor ni científico ni técnico al no recoger las miles de alegaciones presentadas.

Además, exigieron también al gobierno de Rajoy que autorice una consulta popular para que sean los canarios los que decidan si se llevan a cabo los sondeos en sus costas o no.