La segunda etapa del segundo fin de semana del Camino de Los Valores que organiza la asociación Up2U Project daba comienzo en la mañana de este domingo. A las 07.45 de la la comitiva se ponía en marcha.
La Cruz de Tejeda fue el punto de salida de este camino que concluyó en Gáldar, tras cubrir un total de 49 kilómetros de este tramo del Camino de Santiago en Gran Canaria. La primera etapa se celebró el sábado, cuando recorrieron 15 kilómetros desde Tunte a la Cruz de Tejeda.
Los peregrinos avanzaron a un ritmo moderado y sin incidencias de ningún tipo, concluyendo el recorrido en unas ocho horas, con una parada técnica en Los Pinos de Gáldar, un avituallamiento en Lomo Pavón y una última parada técnica en EL Saucillo.
En esta segunda etapa han caminado en un día nublado con predominio de niebla y lluvias débiles y una temperatura que ha oscilado entre los 10 y 15 grados.
“Al tener un tiempo más húmedo hemos tenido un camino diferente, el paisaje está mucho más verde a los chicos los enriquece porque no están acostumbrados”, explicaba el monitor Gabriel Espinosa, que repite experiencia acompañando a un grupo de jóvenes.
Un total de 79 personas participaban este fin de semana en el Camino de Los Valores. Entre ellos hay jóvenes de medidas judiciales o de protección, adolescentes en riesgo de exclusión social y menores migrantes no acompañados que alcanzaron las costas canarias en cayucos o pateras.
“El objetivo de este camino es que jóvenes en riesgo de exclusión social conozcan una sociedad diferente, con una mirada abierta a la integración, motivarles a buscar una
oportunidad en la vida y a crear sus propias metas” subrayaba la magistrada jueza, y presidenta de la asociación UP2U Project, Reyes Martel.
Los adultos que los acompañan son educadores sociales, voluntarios, y personas anónimas que han decidido hacer el camino para ayudar a la integración social de estos menores.
“Como educador creas una conexión con los chicos importante, se enriquece el vínculo con la naturaleza. Aprenden a hacer esfuerzos, hacen trabajo en equipo, conocen a otras personas y se van integrando que es la finalidad de este tipo de actividades” destacaba Espinosa.
En torno a las 16.00 los peregrinos alcanzaban la ciudad de Gáldar, cansados pero felices de haber conseguido superar un nuevo reto.
Samuel Abad hizo por primera vez el camino como menor, ahora es voluntario, a su llegada a Gáldar explicaba: “Este camino te aporta más fuerza mental, uno se rinde rápidamente y quiere abandonar, pero al ver qué puedes te fortaleces es igual que la vida”.
Caminando contra la Covid
Este camino también ha estado marcado por la pandemia. Los peregrinos están obligados a cumplir con las medidas de higiene reglamentarias y así concienciarse de la delicada situación que vivimos.
En esta edición no se está realizando noche en ningún albergue y se ha dividido el peregrinaje en cuatro fines de semana con dos etapas cada uno. Se celebra entre noviembre y diciembre de ahí que se haya reducido el número de participantes.
Con la finalización de este segundo fin de semana, quedan pendiente otros dos, el fin de semana del 12 y 13 de diciembre y el del 19 y 20.
Foresta
Durante el peregrinaje se realizó una actividad con la Fundación Foresta en la que los participantes regaron los árboles plantados la pasada edición y limpiaron la zona de la cumbre para evitar incendios forestales.