La tormenta ‘Hermine’ se ha alejado de Canarias dejando más de 200 litros por metro cuadrado a su paso por Gáldar este fin de semana. El ciclón tropical dejó estas cifras en las medianías y algo más de 120 litros por metro cuadrado en el casco, convirtiendo a Gáldar en uno de los municipios más afectados del Archipiélago, que este lunes ha pasado de estar en alerta máxima a alerta.
Teodoro Sosa, alcalde del municipio, visitó este lunes las zonas más afectadas del municipio en compañía de la teniente de alcalde, Valeria Guerra; el concejal de Vías y Obras, Agustín Mendoza; el concejal de Seguridad, Pedro Mendoza; y los mandos policiales, para conocer de primera mano los daños que ha dejado ‘Hermine’. Desde El Tablado hasta Los Dos Roques, pasando por El Andén, Barranco Hondo, Martorell y Sardina, los representantes del grupo de gobierno y los mandos policiales visitaron desprendimientos en carreteras, derrumbes de muros, escorrentías y zonas anegadas, algunas de las principales consecuencias de ‘Hermine’.
“Por suerte ha sido un agua serena y calmada pero también ha dejado incidencias. Los agricultores, sobre todo el sector del plátano, la reciben con los brazos abiertos pero vamos a tener una semana de mucho trabajo para poner en orden todos los desperfectos”, asegura el alcalde, Teodoro Sosa.
El primer edil mostró su preocupación, sin embargo, por las incidencias eléctricas, que han dejado algunos puntos del municipio más de 24 horas sin luz. “Estamos en permanente contacto con Endesa en sectores como en el Barranco del Juncal, en Las Majadillas, Sardina, en Lomo San Antón o en la parte baja de La Montaña”, aseguró Sosa, que pide a los vecinos “paciencia porque en algunos puntos se han quemado algunas cajas de fusibles y se tarda más, aunque comprendo que después de tantas horas sin luz es muy complicado”.
El alcalde, que subrayó que todo el equipo de limpieza está distribuido por el municipio, resumió que, “en general, hemos tenido las incidencias habituales con tanta cantidad de agua, pero agradecemos que haya venido serena y sin viento. Tras el Delta y Filomena, la tormenta ‘Hermine’ ha venido con mucha más calma”. “Hay que ver lo positivo, que el campo y los agricultores lo requieren, se llenan los embalses y se ahorran unas cuentas regadas, que es de agradecer”, concluyó Sosa, que agradeció a los equipos de todas las áreas implicadas, a la empresas colaboradoras y a los cuerpos de seguridad su esfuerzo en estas últimas horas.