Teodoro Sosa, alcalde de Gáldar, entregó en la mañana de este viernes a Jordi Ribera Romans el título de Hijo Adoptivo de la Ciudad. El seleccionador español de balonmano masculino, entrenador del Balonmano Gáldar de 1992 a 2003, época dorada del club, no pudo estar presente en la entrega de Honores y Distinciones del pasado 12 de julio, en el marco de las 542 Fiestas Mayores de Santiago, ya que se encontraba en los Juegos Olímpicos de París 2024, competición en la que logró una medalla de bronce que mostró a la corporación municipal.
«A pesar del tiempo que ha pasado su corazón sigue estando en Gáldar. Hoy es seleccionador de balonmano pero durante más de diez años estuvo en Gáldar y guarda sus inicios en la élite del balonmano. Esta visita muestra que sigue teniendo un cariño muy especial por Gáldar», explicó el primer edil, que estuvo acompañado en la entrega por Julio Mateo Castillo, primer teniente de alcalde y concejal de Relaciones Institucionales.
«La historia del Club Balonmano Gáldar no se entendería sin Jordi Ribera, fue uno de los artífices para que esta ciudad respire balonmano y ese legado se mantiene intacto muchas décadas después de su marcha. Es una distinción y un homenaje más que merecido», añadió el primer edil.
Jordi Ribera aseguró que «para mí es un gran honor recibir este reconocimiento», indicó el seleccionador, que hizo entrega de una camiseta de la selección española personalizada al alcalde de la ciudad. «Llegué aquí con solo 29 años, con poca experiencia profesional, e hicimos un gran trabajo. El equipo empezó a jugar muy bien, con un estilo diferente en aquella época, muy rápido y que no se entendía. Fuimos unos pioneros en el juego y logramos grandes resultados a nivel nacional e internacional», añadió Ribera.
Además, agregó que «Gáldar ha sido un lugar en el que experimenté muchas cosas, con chicos que vinieron a formarse como Dani Sarmiento o David Carvajal, que luego recalaron en grandes equipos. Fue una etapa muy bonita de la que aún guardo grandes amigos», recordó.
Jordi Ribera, nacido en Girona, ocupó el banquillo del Balonmano Gáldar en once de sus doce temporadas en la División de Honor. Bajo su mando el CB Gáldar se convirtió en uno de los clásicos de la Liga Asobal en los noventa y a inicios de los 2000, un equipo respetado y que generó una unión inolvidable con la afición en el Polideportivo Juan Vega Mateos, donde era muy difícil de batir. De hecho, en Gáldar cayeron todos los grandes del balonmano nacional como el Barcelona, el Portland San Antonio o el Teka en jornadas inolvidables para todos los amantes de este deporte en el municipio.
Durante sus once años al frente del Club le llevó a los mayores éxitos de su historia, logrando consolidarse en la máximo competición de este deporte a nivel nacional y jugando competición continental. En la actualidad dirige a la selección española absoluta masculina desde 2016, con la que ha conseguido dos medallas de oro (2018 y 2020) y una plata (2022) en Campeonatos de Europa, dos bronces en Campeonatos del Mundo (2021 y 2023) y dos bronces en los Juegos Olímpicos (2021 y 2024).
En el acto, celebrado en las Casas Consistoriales, participó una representación del Balonmano Gáldar, incluido Dani Sarmiento, entrenador en las categorías de formación del Club y exjugador de balonmano grancanario que coincidió con Jordi Ribera en la época dorada del Balonmano Gáldar y posteriormente en la selección española.