El comisario de la muestra, Jorge Onrubia, el coordinador de Cultura, Larry Álvarez y la directora de la Cueva Pintada, Carmen Gloria Rodriguez.

La exposición recoge en siete paneles informativos el desarrollo de otros tantos proyectos arqueológicos en los que han participado más de veinte universidades españolas y marroquíes. Se inicia en Gran Canaria el periplo por territorio español que la muestra desarrollará próximamente tras su exhibición en Marruecos, después de ser inaugurada en Rabat el pasado año por S.M. el Rey D. Juan Carlos I y Mohamed VI.

El coordinador general de Cultura, Patrimonio Histórico y Museos del Cabildo de Gran Canaria, Larry Álvarez, y el cónsul general de Marruecos en Canarias, Ahmed Moussa, inauguraron en la mañana de hoy viernes, día 8 de agosto, en el Museo y Parque Arqueológico Cueva Pintada de Gáldar (Calle Audiencia, 2), la exposición denominada ’25 Años de cooperación arqueológica hispano-marroquí: de la Yebala al Dra, entre la prehistoria y la Edad Moderna’, una muestra que recoge en varios paneles explicativos los principales proyectos llevados a cabo por diferentes equipos de investigadores de ambos países en territorio marroquí a lo largo de estas más de dos décadas de estrecha y fecunda colaboración.

Organizada por el Ministerio de Cultura y la Biblioteca Nacional del Reino de Marruecos, con el apoyo de la Embajada de España en Rabat y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), permanecerá abierta en el mencionado equipamiento dependiente del Cabildo grancanario hasta el 27 de octubre, mostrando en siete bloques temáticos recogidos en otros tantos paneles informativos, los resultados de las exploraciones arqueológicas realizadas en las provincias de Jerada, Larache, Tetuán, Tánger o Chefchauen, entre otras.

Comisariada por los arqueólogos Jorge Onrubia Pintado, Salim Fallaha Valdayo y Youssef Bokbot, la muestra fue inaugurada el pasado año por S.M. el Rey D. Juan Carlos I y Mohamed VI, en el marco de la visita oficial y de trabajo que cursó el monarca español al vecino país africano, siendo ahora Gran Canaria el primer territorio español en el que será exhibida tras su paso por las ciudades de Rabat, Fez, Tetuán, Tánger y Casablanca. La muestra no exhibe materiales arqueológicos, sino detalla al público la importancia y el proceso de trabajo al que se han visto sujetas las prospecciones arqueológicas reseñadas en los siete paneles.

SIGNIFICACIÓN PARA CANARIAS

Según señala el coordinador general de Cultura, Patrimonio Histórico y Museos del Cabildo grancanario, Larry Álvarez, “la presentación en el Museo y Parque Arqueológico Cueva Pintada de este interesante recorrido explicativo por la arqueología de Marruecos cobra un sentido especial, ya que a través de los trabajos de esas exploraciones, nos acercaremos tanto a la geografía y a la historia de una amplia región del continente africano de donde muy probablemente proceden las poblaciones prehispánicas de Canarias, como a los procesos históricos y a los lugares para la memoria, que nos unen al norte de África desde la integración de las islas a la Corona de Castilla”.

“Si además añadimos que en la Isla se inaugura el periplo nacional previsto por la muestra y que el Museo y Parque Arqueológico Cueva Pintada ha participado en algunos de estos programas de cooperación, especialmente en el desarrollado en el sur de Marruecos bajo el título ‘Investigaciones arqueológicas en la región de Sus-Tekna’, la exhibición de esta singular muestra está más que justificada”, añade Larry Álvarez.

En este sentido el propio Álvarez señala que la exposición ofrece algunas curiosidades históricas vinculadas a algunos de los vestigios arqueológicos referenciados, como es el caso de los restos de la torre hispano-canaria de San Miguel de Asaca, fundada en 1500 por un ejército expedicionario comandado por Alonso Fernández de Lugo y del que formaban parte muchos indígenas de Gran Canaria (entre ellos el célebre Pedro Maninidra, hermano de don Fernando Guanarteme), que encontrarían allí más tarde la muerte.

La exposición ’25 Años de cooperación arqueológica hispano-marroquí: de la Yebala al Dra, entre la prehistoria y la Edad Moderna’ conmemora el cuarto de siglo de las primeras gestiones y actividades que culminaron con la firma, en 1988, del Protocolo de Cooperación Hispano-Marroquí en materia de Arqueología y Patrimonio. Desde entonces, hemos asistido al desarrollo de un buen número de programas bilaterales de cooperación arqueológica que, impulsados y financiados por distintos organismos tanto marroquíes como españoles, han tenido por objeto diversas regiones del territorio marroquí.

Durante esos 25 años de colaboración en materia de arqueología se han llevado a cabo un total de 15 intervenciones en el conjunto del país, que han contado con la participación de más de veinte universidades españolas y marroquíes.

BLOQUES TEMÁTICOS

La exposición se encuentra dividida en varios apartados que abordan en paneles explicativos los siguientes bloques temáticos: ‘Ocupación humana de la zona oriental de Marruecos durante el Pleistoceno’, ‘Prospecciones arqueológicas en la región de Yebala-Ghomara’, ‘Carta arqueológica del norte de Marruecos’, ‘Orígenes de la agricultura e historia de la vegetación’, ‘Mzora: Megalitismo e historia compartida’, ‘Lixus: Sector del algarrobo y del área Cámaras Montalbán’ y ‘Tamuda: Investigación y puesta en valor’.

El primero de ellos hace referencia a trabajos realizados en la región de Jerada, en la zona oriental de Marruecos, rica en yacimientos prehistóricos y en material arqueológico. Las investigaciones que han sucedido a las excavaciones han permitido reconstruir la secuencia de la presencia humana en la región para el último millón de años. Con estos datos se está elaborando un estudio completo sobre los más antiguos grupos humanos del Marruecos Oriental y sus comportamientos de subsistencia.

El segundo proyecto explica la localización y catalogación, en la cuenca del río Lau, de cerca de medio centenar de nuevos yacimientos prehistóricos y preislámicos. Los trabajos de prospección se completaron con la realización de sondeos arqueológicos que sirvieron para determinar que la ocupación prehistórica de esta cavidad se extendió durante unos 15.000 años, entre el Neolítico y el Paleolítico Superior.

El tercero de ellos aborda la naturaleza de un proyecto de prospección arqueológica llevado a cabo en la región de Tánger-Tetuán que ha permitido documentar más de 200 yacimientos, el 75% inéditos, cuya cronología se escalona entre el Paleolítico y la época moderna. Sus aportaciones son especialmente novedosas tanto para el conocimiento de las sociedades prehistóricas, como para las épocas púnicomauritana y romana.

El cuarto bloque se refiere a los trabajos impulsados en el complejo de cuevas naturales de El Khil con el objetivo de explorar el proceso de adopción de la agricultura en este territorio que ha vivido cuatro fases de ocupación prehistórica fechadas entre finales del VI y finales del V milenio a.C. Se ha podido así certificar que la agricultura se encuentra plenamente establecida en el norte de Marruecos desde hace aproximadamente 7.350 años. Está basada en el cultivo de varios tipos de trigo, de cebada, y de diversas leguminosas entre las que destacan las habas.

El quinto apartado da cuenta de los trabajos seguidos en la región de Larache en torno al monumento megalítico de Mzora, en el que además se llevó a cabo una experiencia piloto orientada a la creación de una Escuela Taller en la zona, aprovechando las habilidades profesionales vinculadas a la investigación arqueológica y patrimonial para proporcionar el contenido socio-formativo necesario para abrir nuevas expectativas laborales a los jóvenes de ambos sexos de las aldeas enclavadas en el área de estudio.

El sexto panel de la exposición se centra en un proyecto centrado en la colina de Chummis, en Larache, cuyos hallazgos realizados permiten, sobre todo, ilustrar las etapas fenicia a mauritana de la historia de Lixus. Finalmente, el séptimo y último bloque explica al visitante el proyecto de investigación y puesta en valor de Tamuda, realizado en la zona periurbana de Tetuán entre los años 2006 al 2012.

Uno de los tres comisarios de la muestra, el arqueólogo Jorge Onrubia, especializado en las Islas Canarias y el Magreb presahariano, ha sido también responsable científico, junto con José Ignacio Sáenz Sagasti y la actual directora del Museo y Parque Arqueológico Cueva Pintada, Carmen Gloria Rodríguez Santana, del programa de investigaciones arqueológicas acometido en dicho equipamiento de Gáldar.

La exposición ’25 Años de cooperación arqueológica hispano-marroquí: de la Yebala al Dra, entre la prehistoria y la Edad Moderna’ podrá visitarse en el Museo y Parque Arqueológico Cueva Pintada de Gáldar (calle Audiencia, 2) hasta el 27 de octubre, de lunes a sábado, de 10.30 a 19.30 horas, así como los domingos y festivos, de 11.00 a 19.00 horas.

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