El entierro de la Sardina celebrado en la noche de este sábado volvió a congregar a decenas de viudas desconsoladas que quisieron acompañar y estar presente en la triste despedida de unas fiestas que han brillado por su gran participación.
Le acompañaron en el recorrido toda una comitiva desconsoldada que lloraba el final del Carnaval que este termina su programación con el Domingo de Piñata en la Plaza de Santiago. Azafatas de vuelo, cabareteras de nego riguroso, y muchas viudas afanadas en mostrar su dolor por este final de un viaje que ha sido inolvidable.
Una vez reducida a cenizas, las viudas se recuperaron de inmediato para continuar con la verbena en la Plaza de Santiago, que cierra, y hasta el año que viene, esta vuelta al mundo en 80 días en Gáldar.