Los fondos aportados permitirán la financiación del 85% de las acciones previstas en los planes operativos elaborados por las corporaciones insulares, de acuerdo con las propuestas de los municipios.
Con respecto a la provincia oriental, la Isla de Gran Canaria recibirá algo más de cuatro millones de euros de los que al Cabildo Insular le corresponden 1,8 millones de euros. Además se han aprobado inversiones propuestas por los ayuntamientos de San Bartolomé de Tirajana(490.422 euros), Telde(277.910 euros), Santa Lucía (557.495 euros), Gáldar (81.400 euros), Agüimes (219.206 euros), Arucas (171.797 euros), Las Palmas de Gran Canaria (238.000 euros), Mogán (45.475 euros), Valsequillo (8.863 euros) y Teror (17.095 euros) .
La orden del Gobierno de Canarias prevé también destinar 783.257 euros al Cabildo de Fuerteventura y 323.869 euros al de Lanzarote para impulsar las Zonas Comerciales Abiertas de estas islas.
En cuanto a la provincia occidental, corresponde a la Isla de Tenerife algo más de cuatro millones de euros de los que el Cabildo Insular recibirá 1,4 millones de euros. Además, se han aprobado inversiones propuestas por los ayuntamientos de Puerto de la Cruz (625.576 euros), Adeje (735.598 euros), Arona (1,1 millón de euros), Granadilla (146.179 euros) y La Orotava (46.454 euros).
La orden del Gobierno de Canarias prevé también destinar 712.185 euros al Cabildo de La Palma y 488.912 euros al de La Gomera para impulsar las Zonas Comerciales Abiertas de estas islas.
Estas ayudas son de vital importancia si se tiene en cuenta que el comercio minorista en Canarias es el subsector que mayor valor añadido económico bruto proporciona a las Islas y que además cuenta con una tasa de empleo del 20% con respecto al total.
Hasta los años 70 el comercio en Canarias se caracterizaba por estar localizado en los centros neurálgicos de las ciudades y pueblos y estaba conformado por pequeños establecimientos, eminentemente de carácter familiar, especializados en la comercialización de una gama reducida de productos. Sin embargo, a partir de esa década, la instalación de las grandes superficies comerciales revolucionó el mercado canario al ofertar una gama amplia de productos que alcanzan la práctica totalidad de los artículos que un consumidos puede demandar, a precios bajos y en un horario comercial más amplio.
Los «comercios tradicionales» no pudieron competir con esta nueva oferta y, paulatinamente, se produjo una desertización comercial de los cascos históricos de las ciudades, además de un declive empresarial en zonas de gran atractivo histórico y arquitectónico. Por todo ello, para evitar la degradación de estos espacios en nuestras ciudades y pueblos, El Gobierno de Canarias trabaja en la creación y potenciación de Zonas Comerciales Abiertas.
Estas Zonas Comerciales Abiertas se crean a partir de una serie de comercios cercanos, ubicados en un espacio definido y al aire libre, en el centro de las ciudades, pueblos o barrios, donde es posible aplicar medidas de gestión conjuntas. El Ejecutivo canario pretende que los beneficios de estas inversiones favorezcan especialmente a los vecinos cercanos a las Zonas Comerciales abiertas, si bien, no se descarta que se pueda provocar una transferencia de habitantes de otros municipios hacia los espacios elegidos, atraídos por la calidad de la oferta comercial y de restauración y por la espectacularidad de los espacios arquitectónicos en los que se asientan estas zonas.
El Gobierno de Canarias, a través de la Dirección General de Comercio y Consumo de la Consejería de Economía, Industria, Comercio y Conocimiento, ha gestionado en los últimos años alrededor de 70 millones de euros para este fin y ha conseguido establecer un programa de actuaciones conjuntas con otras instituciones (Ayuntamientos y Cabildos) dado que las acciones a desarrollar se concretan en unos programas sectoriales para la potenciación de estas zonas comerciales que han sido elaborados por las corporaciones insulares de Canarias, de acuerdo con los municipios de cada territorio.