La concejala de Servicios Sociales y primera teniente de alcalde, Ana Teresa Mendoza, fue la encargada de presentar el nuevo reglamento que sustituirá, tras su aprobación definitiva, a la actual ordenanza que regula las ayudas de emergencia social. Según explicó la concejala, se pretende “abrir un poco mas el abanico” en las ayudas que se prestan a los más de trescientos ciudadanos que reciben la ayuda de los servicios sociales municipales. De esta manera, con el nuevo reglamento se aumentará el tope anual de ayudas hasta los 2.500 euros, además de incrementarse los importes de ayuda por alimentos por miembros de familia, para lo que se contará además por primera vez con incrementos especiales por celiaquía, cuyos alimentos siempre suponen un coste añadido. Se aumentan también los importes de ayuda por luz, debido fundamentalmente al incremento del coste de la energía eléctrica y se introducen ayudas por medicación por un importe de 500 euros anuales; para la adquisición de mobiliario por 300 euros anuales, reparaciones en viviendas con un tope de 1.500 euros cada dos años y se aumenta el tope de ayudas por alquiler al año a 2 en lugar de 1. Todo ello contando con los pertinentes informes de servicios sociales. Sin embargo, como principal novedad, este reglamento incluirá un procedimiento de urgencia por un importe de 50 euros, mediante el cual cualquier ciudadano que se encuentre en apuros económicos recibirá en el día dicha cantidad para evitar “que en el día no falte comida en ninguna vivienda del municipio”.

El alcalde de Gáldar, Teodoro Sosa, aseguró que el objetivo de esta modificación es “ayudar a nuestra gente” y recordó el convenio firmado recientemente con Endesa para evitar cortes de luz a las familias que no puedan afrontar el pago del recibo de la luz, que solo han firmado los municipios de Telde y Gáldar y también las negociaciones con la empresa concesionaria del servicio de aguas en el municipio para evitar también los cortes de agua.

El nuevo reglamento recibió las felicitaciones del grupo socialista en palabras del edil Antonio Mateos, quien aseguró que mejora sustancialmente a la ordenanza que ya existía y felicitó a los técnicos de servicios sociales por la redacción. En el mismo sentido se expresó el concejal Pepe Juan Rodríguez, quien alabó la “sensibilidad” del grupo de gobierno con los ciudadanos que peor lo han pasado con la crisis. El concejal del grupo mixto, Aladino Suárez, presentó una enmienda que será tenida en cuenta en el periodo de alegaciones que se abre a partir de su publicación en el BOP y por un periodo de un mes, cuando se procederá a su aprobación definitiva.

En la sesión se abordó también una moción institucional sobre el drama de los refugiados que se está viviendo en toda Europa debido a la guerra en Siria. La corporación solicitó al Estado la creación de una red de atención especializada que ayude y asesore a los afectados, y propuso 9 ubicaciones en las medianías que se ofrecen al gobierno para acoger a refugiados en el municipio. Además, se instó al gobierno a la rehabilitación de las mismas y a la elaboración de un censo de antiguas casas de maestros abandonadas y residencias escolares en las que también se podrán acoger a las personas que huyen de la guerra.

El Partido Socialista presentó sendas mociones en las que se solicita el derribo del centro Argumastel, en San Isidro y posterior construcción de un edificio y casa del agricultor por un lado; y la construcción de una grada techada en el Estadio de Barrial. Ambas mociones fueron rechazadas porque la prioridad para el barrio de San Isidro es, según señaló el primer edil, la canalización de la calle Músicos Batista, por donde discurre el agua del barranco de La Enconada cada vez que llueve inundando las casas de la zona, como han pedido los propios vecinos. El alcalde aseguró además que la casa del agricultor ya tiene una parcela, en la cual llegaron incluso a comenzar las obras, pero un litigio judicial las tiene paralizadas por el momento. La segunda de las mociones fue también rechazada porque lo prioritario en el Estadio de Barrial y en los de Cañada Honda, Sardina y San Isidro es un nuevo césped. El concejal de Deportes, Ancor Bolaños, recordó las mejoras que se han llevado a cabo en el estadio y anunció que se ha adquirido una máquina para “peinar” y mejorar el estado del césped sintético. “Con la cantidad de necesidades que hay en este pueblo díganle a los ciudadanos que vamos a gastar un dineral en techar las gradas”, sentenció el alcalde.

Sin embargo, el punto más conflictivo de la sesión vino de la mano, una vez más, del grupo mixto, donde los concejales del PP, José Luis González y Pino Jorge por un lado, y Aladino Suárez, volvieron a mostrar sus diferencias. La edila Pino Jorge defendió una moción en la que se exponía el presunto peligro de uno de los revestimientos de madera de la piscina municipal de la Ciudad Deportiva Venancio Monzón. Un informe técnico de un arquitecto municipal acredita que no existe ninguna anomalía en la misma y califica las “manchas” que el PP denunció como un presunto “peligro estructural” como simples anomalías estéticas. El grupo de gobierno acusó al PP de intentar alarmar a la ciudadanía con un supuesto problema estructural que para nada es cierto. En el mismo sentido se expresó el edil de Unidos por Gran Canaria, Aladino Suárez, quien a raíz de la presentación de dicha moción visitó las instalaciones y pudo comprobar que, según sus propias palabras, ciertamente la moción y comunicado publicado en algunos medios por el PP es “alarmista”. La moción no obtuvo ni siquiera el apoyo de toda la oposición, al contar con la abstención del PSOE y el voto negativo del grupo de gobierno.

La aprobación del convenio de colaboración con la Comunidad Autónoma sobra atribución al tribunal administrativo de contratos públicos, la designación del concejal de Urbanismo, Heriberto Reyes, en la Junta de Compensación del Polígono Industrial de San Isidro El Viejo, además de la nominación de la calle La Era, la cancha de Marmolejos con el nombre de Javi Álamo y el otorgamiento del Lazo de Honor de la Ciudad a Radio Ecca, todos ellos aprobados por unanimidad, cerraron la sesión plenaria junto a los asuntos de presidencia y los ruegos y preguntas. Antes de acabar la sesión se guardó un minuto de silencio en memoria de los tres militares fallecidos en aguas entre Senegal y Canarias.