Durante esta semana, prácticamente todos los medios nacionales y regionales han ido destapando las relaciones de José Manuel Soria con las empresas UK Lines y Oceanic S.A. Hasta entonces, el también presidente del PP canario había asegurado que era «totalmente falso» que tuviera o «haya tenido algún tipo de relación con compañías, empresas, entidad o fundación radicadas ni en Panamá, ni en Bahamas ni en ningún otro paraíso fiscal», con lo que han quedado al descubierto sus contradicciones y sus mentiras.

Ninguna voz crítica dentro del Partido Popular en Canarias se había atrevido a mencionar una palabra más alta que la otra, a pesar de las evidentes mentiras del ministro y, si vamos más allá, las decenas de casos de presunta corrupción a los que se enfrentó durante toda su trayectoria política y de los que, hasta ahora, siempre había salido airoso gracias a malabares judiciales a veces casi imposibles. Tan solo el presidente insular de Nuevas Generaciones, Guillermo Gómez, se atrevió recientemente a solicitar públicamente relevo generacional y primarias abiertas en el partido. Cuestiones que le han sido imposibles de plantear internamente debido al férreo control de las voces internas que ejerce Soria. Y entre ellas, uno de los más acérrimos defensores del hasta ahora líder todopoderoso es el portavoz del PP en el municipio de Gáldar, José Luis González, que obedeciendo toda clase de órdenes calla, confiando que con su inquebrantable lealtad también le llegaría algún día el turno de ocupar puestos de responsabilidad.

De hecho, la última aparición juntos se realizó hace apenas unos meses, cuando el ministro fue invitado por José Luis González a un almuerzo en su finca privada, ubicada en el barrio galdense de Los Quintana y a la que asistieron unas 30 personas.

Sobre este espinoso asunto que ha acabado con el ministro fuera de la política, José Luis González guarda hermetismo absoluto y no ha realizado -hasta el momento de esta publicación- ninguna declaración pública que le hiciera recuperar algo de dignidad política. Sí arremete sin embargo, una vez más, este mismo viernes con el viaje institucional a Nueva Orleans que realizaron los alcaldes de Gáldar y Arucas, el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Gáldar y cuatro miembros del gobierno canario, con el que finalmente se demostró que mintió a la opinión pública aprovechando la ausencia del primer edil galdense. Cuestión de prioridades.

Hoy se nos va el mentor, pero para desgracia de la política canaria quedan en las instituciones toda una generación de pupilos que heredan su forma de entender la política, que se basa en dos características fundamentales: la utilización interesada de la justicia y los estamentos públicos, y por otro lado, la mentira como único medio para lograr sus objetivos e intereses -que no siempre son los generales-, algo que estamos viendo en nuestro municipio de parte de los cargos del PP desde el inicio del presente mandato y que en los próximos meses se les volverá en su contra.

Otra de las voces autorizadas que han hablado estos días es el que fuera jefe de comunicación de José Manuel Soria en su etapa como alcalde de Las Palmas de Gran Canaria y que llegó a escribir en Canarias Ahora: «Todos conocen las leyes que rigen esa peculiar Sicilia que es el Partido Popular, donde los grandes capos mandan y punto. Mandan en vidas y haciendas como en un feudalismo de nuevo cuño cuya sinfonía es el rigor mortis» … «Es una secta fundada en el clientelismo y la financiación mafiosa…». ¿Entienden ahora lo del «hermetismo absoluto?».