Bailes, color, farolillos, papagüevos y sobre todo, caballitos para galopar al son de la música y vivir desde el barrio de San Sebastián al frontis de la Iglesia de Santiago uno de los actos más esperados de las Fiestas Mayores de Santiago: la noche de los Caballitos de Fuegos de Gáldar, una fiesta recuperada hace tres años que no quiere irse y que tras ser rescatada por el Ayuntamiento galdense ha logrado cautivar a toda una Ciudad.
Cuatro bandas de música y más de 200 caballos galopando hasta la Iglesia de Santiago llenaron de color y de un ambiente único las calles del casco histórico en la noche del volcán anunciador de los días grandes de estas Fiestas Patronales.
El alcalde de la ciudad, Teodoro Sosa y el concejal de Cultura y Fiestas, Julio Mateo junto a otros concejales del consistorio y muchos vecinos, grupos de amigos y familias enteras bailaron a galope en un recorrido que fue presenciado a pie de calle por otros tantos vecinos que no quisieron perderse esta fiesta.
En el frontis esperaba el caballo que el fuego hizo prender como colofón a esta noche especial de Danza y Zambra de CAballitos de Fuego con un espectáculo musical y de danzas previo y con el fuego también como protagonista. Una ciudad que se echó a la calle con sus caballitos y que ya se dispone a vivir su última semana grande de las Fiestas Mayores de Santiago.
puso la nota para que la fiesta sea todo un espectáculos. Un hervidero de gente entusiasta, alegre y con los ojos vivos ovacionaron el paso de jinetes y amazonas. Los móviles, de la muchedumbre, grabaron para posterioridad los coloridos y simpáticos caballitos que se adueñaron de la Calle Larga… Aunque este año el espectáculo en el frontis de la iglesia fue (desde mi punto de vista) bastante pobre en comparación a otros años. Esperaba una representación que dejara a la multitud con ganas de ver más (los buenos espectáculos siempre deja al espectador con ese sentimiento)